Leemos en Noticias Jurídicas que el TSJ de Canarias ha reconocido a una trabajadora una indemnización por el daño moral consecuencia de la reducción de jornada que le fue concedida, porque se le negó su derecho a concretarla de acuerdo con un horario compatible con sus necesidades familiares. Según la sentencia, la negativa empresarial fue infundada e irrazonable, porque la trabajadora había justificado cual era el horario de la guardería en la que había matriculado a su bebé de 5 meses y que su marido viajaba por motivos laborales, lo que obligó a la trabajadora a judicializar su derecho a conciliar, sin poder compatibilizar de forma adecuada y óptima trabajo y familia. La resolución señala que esta negativa empresarial es un incumplimiento legal compatible con la generación un daño, pues de otro modo la afectada no habría planteado una acción judicial reclamando poder desempeñar su jornada en un horario compatible con el centro de educación infantil en el que había matriculado a su hijo.